La finalidad de los FAE es reducir la hiperexcitabilidad o irritabilidad neuronal y su extensión a otras neuronas, lo cual se consigue a través de diferentes mecanismos de acción, no siempre bien conocidos.
Los mejor investigados son:
- Estabilizando la membrana de las neuronas epilépticas que es muy excitable y además genera descargas anormales espontáneas.
- Limitando la propagación de las descargas anormales a otras neuronas.
- Aumentando la neurotransmisión inhibidora, la cual ayuda a evitar que las descargas epilépticas se amplíen.
- Disminuyendo la neurotransmisión excitadora que facilita la propagación e intensidad de las descargas.
Mediante estos diversos modos de acción Los FAE controlan las crisis epilépticas pero no curan la epilepsia.
Para lograr su objetivo el FAE debe permanecer constantemente y en cantidad suficiente en el organismo, por lo que su toma regular es imprescindible.